La Asamblea Legislativa aprobó, con 65 votos a favor, una nueva ley que otorga a las municipalidades las herramientas necesarias para ordenarse administrativamente en un plazo de dos años.
Esta normativa, que recibió el respaldo mayoritario en la sesión plenaria 153, busca garantizar un proceso fluido y transparente en los cambios derivados de la fusión de los distritos.
El objetivo principal de esta legislación es brindar a los gobiernos municipales, que asumirán sus funciones el próximo 1° de Mayo, un marco normativo que facilite una transición ordenada y eficiente. Una de las características más destacadas de esta ley es que no impide a los distritos suspendan servicios y proyectos en favor de la población durante este período de transición.
La Ley Especial de Transición para la Reestructuración Municipal faculta la intervención del Ministerio de Hacienda para auditar el proceso de transición y obliga a trabajar por la certificación antisoborno, con el fin de garantizar la transparencia en todas las etapas del proceso.
Entre los beneficios que esta nueva ley proporciona a los municipios se encuentra la posibilidad de establecer sus propios presupuestos, lo que les permitirá priorizar áreas clave de inversión y llevar a cabo proyectos que impacten positivamente en sus comunidades. Estos procesos contarán con el acompañamiento de la Dirección Nacional de Compras (DINAC).
Es importante destacar que esta normativa tiene carácter transitorio y estará vigente por un período máximo de dos años. Los diputados responsables de su elaboración señalaron que esta iniciativa permitirá ordenar los procesos y figuras administrativas en un plazo razonable, garantizando la continuidad de los servicios y una transición sin contratiempos.
Con la implementación de esta ley, se espera reducir el riesgo de actos de corrupción y el despilfarro de recursos públicos. Además, se crearán las condiciones necesarias para hacer autosostenibles a las comunas y se evitará el endeudamiento desmedido que ha sido una preocupación histórica.
