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Más de 35,870 niños salvadoreños viven en extrema pobreza, según informe de Unicef y el Banco Mundial

Más de 35,870 niños salvadoreños viven en hogares en condiciones de extrema pobreza, según reveló un estudio publicado este miércoles por el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) y el Banco Mundial (BM). Este informe, elaborado en el marco de la Semana de Alto Nivel de la Asamblea General de las Naciones Unidas, destaca que es la primera vez que ambas instituciones preparan un documento sobre la pobreza monetaria infantil a nivel mundial.

El estudio utiliza las tres líneas de pobreza del Banco Mundial para analizar la situación. Los hogares que viven con menos de $2.15 diarios se encuentran en el umbral de pobreza extrema, mientras que $3.65 corresponde a ingreso medio bajo y $6.85 a ingresos mediano alto.

De acuerdo con el informe, un 1.9 % de los niños salvadoreños vive en hogares catalogados en pobreza extrema, lo que significa que tienen ingresos insuficientes para adquirir los alimentos necesarios para su desarrollo.

Además, un 8.9 % de los niños se encuentra en el umbral de ingresos medio bajo, lo que equivale a más de 169,000 menores. Por otro lado, un 37.8 % de los niños salvadoreños se ubica en el rango de ingreso medio alto, lo que representa aproximadamente 716,200 infantes.

En Centroamérica, Honduras y Guatemala tienen la mayor población infantil en extrema pobreza, con más de 627,900 y 600,600 niños, respectivamente. En toda la región se estima que hay 1.4 millones de niños que viven en hogares con ingresos mínimos. Estos hogares pobres tienen menos recursos para sobrevivir y son vulnerables a los riesgos del cambio climático y las perturbaciones internacionales, como la pandemia de COVID-19, que sumió a la economía mundial en una recesión y afectó los avances en la reducción de la pobreza.

El análisis de Unicef y el BM también destaca que al menos 30 millones de niños podrían haber salido de la pobreza si no hubiera ocurrido la pandemia de COVID-19, lo que representa un retroceso de tres años en este indicador.

Aunque el número de niños que viven con menos de $2.15 ha disminuido un 13 % entre 2013 y 2022, pasando de 383 millones hace una década a 333 millones el año pasado, las instituciones advierten que los esfuerzos para reducir este umbral no son suficientes para cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030 de la ONU.

Catherine Russell, directora ejecutiva de Unicef, señaló que las crisis agravadas por los efectos de la pandemia de COVID-19, los conflictos, el cambio climático y las perturbaciones económicas han estancado los progresos y han dejado a millones de niños en la pobreza extrema.

Por su parte, Luis Felipe López Calva, director Mundial de Pobreza y Equidad del Banco Mundial, afirmó que estos resultados son un «duro recordatorio» de que los gobiernos no tienen tiempo que perder para reducir los niveles de pobreza y desigualdad.

A pesar de que los niños representan solo un tercio de la población mundial, más del 50 % de las personas en pobreza extrema son niños, lo que resalta la urgencia de abordar esta problemática de manera prioritaria.