Una reciente investigación revela que la Generación Z enfrenta más dificultades que las generaciones anteriores a su edad, pero el secreto para aumentar su felicidad podría encontrarse en el propósito y la calidad del sueño. Según una encuesta realizada por Gallup en colaboración con la Fundación Walton, aproximadamente el 75% de los estadounidenses de la Generación Z encuestados informaron estar al menos algo felices. Sin embargo, este porcentaje disminuyó significativamente a medida que los jóvenes alcanzaban la adultez.
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Según Zach Hrynowski, investigador principal de Gallup, dos factores están fuertemente correlacionados con la felicidad de la Generación Z: la cantidad de tiempo que dedican al descanso y la relajación durante los fines de semana, y, aún más importante, su sentido de propósito. La sensación de que su vida importa y están marcando la diferencia se reveló como un predictor crucial de la felicidad.
La Dra. Chloe Carmichael, psicóloga clínica, enfatiza que la felicidad no se trata simplemente de perseguir emociones positivas, sino de tener un propósito y entender que habrá altibajos en su búsqueda. El propósito puede manifestarse en diferentes aspectos de la vida, como el trabajo, las causas que se apoyan o las relaciones que se forman.
Por otro lado, la Dra. Rachel Salas, profesora de neurología, destaca la importancia del sueño para la salud mental y la felicidad. El sueño insuficiente o de mala calidad puede afectar el estado de ánimo, la irritabilidad, la memoria y la concentración, lo que a su vez puede impactar negativamente las relaciones interpersonales y la felicidad en general.
En resumen, priorizar el propósito y la calidad del sueño puede ser clave para aumentar la felicidad de la Generación Z en un mundo cada vez más desafiante.
