El fuego volvió a surcar los cielos en Nejapa. Los residentes del municipio del Gran San Salvador realizaron una nueva edición de las tradicionales bolas de fuego. El evento, que se celebra cada 31 de agosto, atrae a decenas de curiosos que buscan conocer un poco más sobre esta fiesta.
Este año se cumplen 96 años de esta extrema tradición. Sus orígenes no están muy claros y hay dos versiones que cada residente cuenta. La primera está relacionada con la erupción del volcán de San Salvador en 1658 y la segunda, con tintes religiosos, cuentan una dura batalla con fuego que tuvo San Jerónimo, patrono de la ciudad, con el mismísimo diablo.
En la edición de este año participaron alrededor de 200 jugadores entre los residentes y turistas que lograron inscribirse. Estos dos grupos conformaron los equipos que se enfrentaron durante poco menos de 30 minutos, debido a inconvenientes provocados por personas ajenas a la celebración.
La fiesta siempre está salpicada de adrenalina y emoción. Durante la batalla de fuego, los visitantes corren y ríen. Los que solo llegan a ver también terminan la noche asombrados por el color de la fiesta. Para terminar, las autoridades locales reparten 15,000 tamales entre los asistentes quienes regresan a sus casas después gritar, correr y reír.
Fotografías de una noche llena de adrenalina
El fotoperiodista Rodrigo Silva compartió con el equipo de Qué Pasa SV algunas estampas que marcaron el evento de este pasado 31 de agosto.
Fotografías cortesía de: Rodrigo Silva