FUSAL y 3M El Salvador se unen para combatir la inseguridad alimentaria y la desnutrición infantil
La Fundación Salvadoreña para la Salud y el Desarrollo Humano (FUSAL) ha llevado a cabo un proyecto en colaboración con 3M El Salvador, una empresa líder en soluciones para el hogar, oficinas, empresas e industrias.
El proyecto, que se inició en septiembre de 2022 y concluyó en septiembre de 2023, tuvo como objetivo principal combatir la inseguridad alimentaria en comunidades de Apaneca, Ataco, San Julián y Guaymango, beneficiando a alrededor de 2,400 familias con niños de cero a cinco años.
Las áreas geográficas seleccionadas para la intervención fueron priorizadas debido a su alta incidencia de inseguridad alimentaria y a la presencia de voluntarios comunitarios de FUSAL, lo que garantizó la efectividad y sostenibilidad de las acciones implementadas. Además, se tuvo en cuenta la pobreza multidimensional y el impacto de la inseguridad alimentaria en la zona como factores clave en la selección de las familias beneficiarias.
Según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA), en 2022 se estimó que 900 mil personas en El Salvador estarían en crisis o emergencia alimentaria, siendo el departamento de Ahuachapán una de las zonas más afectadas. Para 2023, se advirtió sobre la inseguridad alimentaria aguda en 18 focos de hambruna en 22 países, incluyendo El Salvador.
Se sugiere que, para finales de 2023, la cifra de salvadoreños en inseguridad alimentaria ascienda a 1 millón de personas, especialmente en Sonsonate, Usulután y Cuscatlán.
Las acciones clave de este proyecto incluyeron la movilización de alimentos fortificados, la formación de voluntarios comunitarios para el monitoreo y vigilancia nutricional, y el equipamiento de Nutripuntos para evaluar el estado nutricional de los niños.
Se fortalecieron los conocimientos de 120 voluntarios comunitarios, permitiéndoles brindar seguimiento y consejería nutricional a las familias. Además, se equiparon 75 Nutripuntos con herramientas para el monitoreo de talla y peso, así como kits para la preparación de alimentos, lo cual ha sido fundamental para promover hábitos saludables de alimentación y garantizar la nutrición de la niñez.
Jenniffer Morán, Jefe de Operaciones del Programa de Primera Infancia de FUSAL, destacó la importancia de estas acciones: «Fortalecimos los conocimientos de los voluntarios comunitarios y equipamos los Nutripuntos para promover hábitos saludables de alimentación y vigilar la salud nutricional de los niños pequeños. Esto nos ha permitido detectar tempranamente problemas de desnutrición y promover un crecimiento saludable».
Además de la entrega de alimentos fortificados, FUSAL y 3M proporcionaron a los voluntarios comunitarios un recetario con preparaciones nutritivas que utilizan como base el alimento donado, arroz con soya texturizada, brindando opciones saludables y deliciosas para las familias.
Karla Segovia, Directora Ejecutiva de FUSAL, expresó su satisfacción por el impacto positivo logrado gracias a la colaboración con 3M El Salvador: «Este proyecto demuestra el impacto positivo que puede lograrse cuando la comunidad, las organizaciones y los voluntarios trabajan juntos para abordar problemas críticos como la inseguridad alimentaria y la desnutrición infantil».
Tadeo Martínez, gerente de país de 3M El Salvador, resaltó la importancia de apoyar a la población más vulnerable: «Nos complace saber que estamos llegando a estas familias que se encontraban en situación de vulnerabilidad en cuanto a seguridad alimentaria, logrando el propósito de este proyecto. En esta labor, contamos con el apoyo de FUSAL y su red de voluntarios, quienes tienen una amplia trayectoria en este tipo de iniciativas».