La autoproclamada vicepresidenta de Nicaragua, Rosario Murillo, anunció este miércoles que los restos del fallecido expresidente de El Salvador, Mauricio Funes, serán incinerados. En una conferencia de prensa, Murillo explicó los planes de la familia para honrar al exmandatario, quien falleció el martes por la noche a los 65 años.
“Esta mañana su hijo Carlos nos ha informado que van a esperar unos días después de haber sido incinerado. El hermano Presidente y los familiares van a resguardar su urna funeraria para esperar la llegada en los próximos días de otros familiares y celebrar sus rituales, y sobre todo celebrar su vida en familia, como amigos y compañeros del Hermano Mauricio Funes”, declaró Murillo.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Nicaragua también confirmó que los actos fúnebres del expresidente salvadoreño se llevarán a cabo en territorio nicaragüense, una decisión respaldada por la familia y los allegados de Funes.
“Hemos informado que los familiares, los compañeros, los amigos del Expresidente Funes han decidido realizar sus ceremonias fúnebres en Nicaragua y hemos agradecido al gobierno de El Salvador, quien en todo momento nos ha hecho latente”, expresó Murillo.
Confirman el fallecimiento de Funes
El Ministerio de Salud de Nicaragua emitió un comunicado oficial en el que confirmó la muerte de Mauricio Funes, ocurrida el martes a las 9:35 de la noche debido a una grave enfermedad.
“El Ministerio de Salud del Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional de la República de Nicaragua informa, con pesar, que el ciudadano Carlos Mauricio Funes Cartagena, expresidente de El Salvador y residente en nuestro país, ha fallecido a las 9:35 PM de esta noche debido a una grave enfermedad”, detalló el comunicado oficial.
Funes, quien gobernó El Salvador entre 2009 y 2014, había residido en Nicaragua en calidad de asilado político desde 2016. En los últimos años, enfrentó varios procesos judiciales en su país natal por acusaciones de corrupción, lo que lo llevó a buscar protección en el país vecino. Su fallecimiento marca el final de una controvertida vida política y personal que dejó una huella en la historia reciente de Centroamérica.