El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales emitió este lunes una recomendación para el uso de mascarillas debido a la persistencia de una masa de humo causada por incendios en la región del Triángulo Norte. Este consejo fue presentado en su informe semanal de calidad del aire.
Los satélites continúan reportando la presencia de incendios en la región, con mayor intensidad en Honduras y el norte de Nicaragua, y en menor medida, en Guatemala. «Se observa que los incendios en la región se mantienen por el momento, lo cual seguirá afectando nuestro país, dependiendo de las condiciones climáticas en menor o mayor medida», detalla el informe. Las lluvias que llegan al país contribuyen a limpiar la atmósfera, aunque los niveles de contaminación del aire siguen siendo preocupantes.
Hasta la semana pasada, Honduras y Guatemala permanecían en alerta debido a los niveles dañinos de contaminación del aire, considerados perjudiciales para la salud.
El Ministerio de Medio Ambiente enfatiza que el uso de mascarillas es especialmente importante para grupos sensibles, como personas adultas mayores, niños, embarazadas y personas con enfermedades crónicas, respiratorias y cardíacas. Además, se sugiere evitar la exposición durante las horas de mayor insolación, entre las 12:00 del mediodía y las 3:00 de la tarde, y abstenerse de realizar ejercicio en lugares abiertos durante períodos prolongados. Las instituciones educativas también deben tomar precauciones para no exponer a los menores.
El informe semanal de calidad del aire reportó que el pasado sábado 1 de junio, los niveles fueron dañinos en la estación ubicada en la Escuela Militar, mientras que en la estación del Centro de Gobierno se calificaron como satisfactorios. Durante el resto de la semana, la calidad del aire se mantuvo satisfactoria, con la excepción del miércoles y el domingo 2 de junio, cuando la estación de la Escuela Militar reportó niveles no satisfactorios.
El índice de calidad del aire dañina para la salud sugiere que las personas con enfermedades respiratorias, como el asma, deben evitar el esfuerzo al aire libre. Todas las demás personas, especialmente los mayores y los niños, deben limitar el esfuerzo prolongado al aire libre. En condiciones no satisfactorias, se recomienda que niños y adultos activos, así como personas con enfermedades respiratorias, eviten los esfuerzos físicos excesivos y prolongados al aire libre.
