Paquita la del Barrio, una de las voces más icónicas de la música ranchera, vivió una vida llena de desengaños amorosos que marcaron su trayectoria. Lu famosa frase “me estás oyendo, inútil”, que ha resonado en los corazones de millones, parece tener una historia personal detrás, una historia que la cantante ha compartido solo a cuenta gotas.
Desde su juventud, Paquita sufrió mucho por el amor, especialmente por un hombre que, aunque nunca lo mencionó directamente, parece haber sido el centro de su dolor. El sujeto en cuestión, un hombre casado con el que tuvo dos hijos, fue la causa de varios de sus sufrimientos. En sus entrevistas, la cantante declaró en vida que se sintió atrapada en esa relación y, aunque muchas veces se le preguntó por qué no dejó al hombre en cuestión, Paquita explicó que en ese entonces su mundo se cerró y no veía salida.
En diversas canciones de Paquita, como “Rata de dos patas” y “Tres veces te engañé”, se refleja claramente el dolor y las traiciones que sufrió. Aunque no ha hablado de manera explícita sobre este hombre, sus letras parecen ser un reflejo de lo vivido en esa etapa de su vida. La cantante veracruzana, nacida el 2 de abril de 1947 en Alto Lucero, sabe tanto de un corazón roto que hasta Ana Bárbara la busca para pedirle consejos sobre el amor en su conocido dueto.
En una de sus entrevistas más recordadas, Paquita relató cómo se metió en una relación con un hombre casado, a pesar de saber que su historia era condenada al fracaso desde el principio:
“Cometí el error de meterme con un hombre casado, se me fueron 7 años de vivir con ese señor. Me junté con ese señor, al principio fue a escondidas de mis mamás (su mamá y su tía), después me armé de valor y les hablé claro, que yo andaba con el señor ese”.
En declaraciones más recientes, Paquita compartió en el programa «El minuto que cambió mi destino» cómo descubrió que este hombre, Miguel Gerardo, con quien vivió, estaba casado. Fue un golpe devastador para ella: “Lo peor es que la esposa de él fue a mi pueblo y me di cuenta de que era casado, ahí empezó el infierno para mí”.
Paquita, en sus entrevistas, también habló de cómo, a pesar de las dificultades, no podía escapar de esa relación, ya que, como ella misma señaló, “La vida te va llevando, tuve que aguantar. No tenía familiares en otro lado, me embaracé otra vez. Fue muy rápido, me enamoré de él y no hubo tiempo de investigarlo. Para mí fue un sufrimiento terrible, se le cierra a uno el mundo y ya con hijos peor”.
El hombre con el que Paquita se enredó fue Miguel Gerardo, quien trabajaba como tesorero del registro civil, mientras ella se desempeñaba como secretaria. Después de ese difícil capítulo en su vida, Paquita se mudó a la Ciudad de México, donde se casó con Alfonso Martínez, un hombre con el que compartió más de 30 años, aunque no sin enfrentar más infidelidades. Tras su divorcio, Paquita decidió no volver a enamorarse y, desde entonces, se ha dedicado a su carrera y a cuidar de sus hijos.
La historia de Paquita la del Barrio fe un testimonio de fortaleza y resiliencia, una mujer que, a pesar de los tropiezos amorosos, continuará siendo una de las artistas más queridas y admiradas del México ranchero.
