La Policía Nacional Civil (PNC) anunció la captura de siete líderes de veteranos de guerra, acusados de planear atentados con explosivos en varios puntos del país para el próximo 1 de junio, día de la segunda toma de posesión del presidente Nayib Bukele y del vicepresidente Félix Ulloa.
La PNC identificó a los arrestados como miembros de la «Brigada de Insurrección Salvadoreña», afirmando que sus objetivos eran gasolineras, supermercados e instituciones públicas. Los detenidos serán procesados conforme a la ley.

Entre los arrestados se encuentra José Santos Melara Yánez, exdiputado del FMLN y coordinador de la Alianza El Salvador en Paz. Melara Yánez fue señalado como el financista de estos planes. Además, fueron capturados Wilfredo Parada, Eliseo Alvarado, Orlando Cartagena, Douglas Recinos, Pedro Alfonso Mira, José Ismael Santos y Roberto Antonio Esquivel.
Según la PNC, Parada, quien fue explosivista durante la guerra, era el encargado de hacer funcionar los dispositivos. Se mostraron imágenes de explosivos descubiertos en Guazapa, al norte de la capital.
El Movimiento de Víctimas del Régimen (Movir), Socorro Jurídico Humanitario, el Bloque de Resistencia y Rebeldía Popular (BRP) y Movimiento de Trabajadores Despedidos habían denunciado la captura de Melara. El BRP calificó la detención como un acto de persecución política y anunció protestas el 1 de junio, considerando inconstitucional la reelección de Bukele. En diciembre de 2023, seis organizaciones instaron a una «insurrección pacífica».






