El padre del joven talento del fútbol mundial, Lamine Yamal, Mounir Nasraoui, expresó fuertes críticas hacia los organizadores del Balón de Oro 2025, tras la gala en la que su hijo quedó en segundo lugar. Aunque Yamal se llevó el Trofeo Kopa al mejor jugador joven, Nasraoui cuestionó que su hijo no recibiera el premio mayor, calificando la decisión de “robo”.
Nasraoui aseguró que la elección representó un “daño moral” para su hijo, considerando que Lamine posee un talento excepcional que merece ser reconocido al más alto nivel. Según el padre del futbolista, la valoración del jurado no reflejó el impacto y rendimiento que su hijo mostró durante la temporada, tanto en competiciones nacionales como internacionales.
La polémica surge en un contexto en el que Yamal ha destacado por su rendimiento sobresaliente en el fútbol europeo, consolidándose como una de las figuras emergentes más prometedoras del deporte. Su habilidad para generar jugadas decisivas y su aporte constante al equipo han generado comparaciones con grandes estrellas de la disciplina, lo que aumenta la expectativa sobre su reconocimiento en premios individuales.
Pese a las críticas, Lamine Yamal continúa enfocándose en su carrera deportiva y en seguir demostrando su talento dentro del campo. La situación ha generado un debate entre aficionados y expertos sobre la justicia y criterios de los premios individuales, manteniendo a Yamal y su trayectoria en el centro de la conversación mediática internacional.






