La NASA ha informado que las probabilidades de impacto del asteroide conocido como “asesino de ciudades” han aumentado, lo que ha generado preocupación entre la comunidad científica. Este cuerpo celeste, cuyo tamaño podría causar daños significativos en caso de colisión, sigue siendo monitoreado de cerca por los especialistas en defensa planetaria.
De acuerdo con los últimos cálculos, aunque el riesgo sigue siendo bajo, el incremento en las probabilidades de impacto ha llevado a los expertos a reforzar los estudios sobre su trayectoria y posibles medidas de mitigación. La agencia espacial continuará evaluando su comportamiento a medida que se obtengan más datos.
Este asteroide forma parte de los objetos cercanos a la Tierra (NEO, por sus siglas en inglés) que son catalogados como potencialmente peligrosos. Sin embargo, los astrónomos enfatizan que aún existen muchas variables en juego y que la vigilancia constante permitirá tomar acciones preventivas en caso de ser necesario.
Las autoridades científicas han hecho un llamado a la calma y aseguran que los avances en tecnología permitirán desarrollar estrategias para desviar o mitigar el impacto de estos objetos espaciales.
