Una joven madre fue condenada a cadena perpetua luego que dejó en abandono a su bebé para irse a vacacionar a Puerto Rico, hecho por el que la pequeña murió de hambre y en deplorables circunstancias.
Se trata de la ecuatoriana Kristel Candelario, de 32 años de edad, quien recibió la condena sin posibilidad de libertad condicional en Cleveland, Estados Unidos, de acuerdo con lo informado en un comunicado por el fiscal del condado Cuyahoga, Michael C. O’Malley.
La pequeña Jailyn tenía solo 16 meses de edad, y quedó dentro de un pequeño corral sin agua, alimento y ningún tipo de cuido, por lo que murió de hambre, deshidratación y en condiciones realmente inhumanas.
“Cometió el último acto de traición, dejando a su bebé aterrorizada, sola, desprotegida, para que sufriera, lo que he oído, que fue la muerte más espantosa imaginable, sin comida, sin agua, sin protección”, expresó con suma indignación el juez del Tribunal de Causas Comunes del Condado, Brendan Sheehan.
De acuerdo con la información, en el verano del año 2023, Candelario realizó un viaje de 10 días a Detroit y a Puerto Rico. Cuando ella volvió, encontró a la bebé inconsciente y llamó a los servicios de emergencia, quienes la declararon muerta.
Tras lo sucedido, el mes pasado, Candelario se declaró culpable del asesinato con agravantes de su bebé, y en el juicio pidió perdón por lo que había hecho a su otra hija y a sus padres, indicando que nadie sabía por lo que ella estaba pasando.
