Mirian Goldemberg, antropóloga y escritora con más de 30 años de experiencia en el estudio del envejecimiento y la felicidad, destaca la importancia de cuestionar los prejuicios que existen en la sociedad en torno a la adultez. Según Mirian, los adultos mayores enfrentan estereotipos erróneos, como la creencia de que son personas dependientes, incapaces de adaptarse a la tecnología o sin interés en aprender cosas nuevas.
En el marco del Día Internacional del Adulto Mayor, la marca de Kimberly-Clark, Plenitud, especializada en productos de incontinencia para adultos, invita a reflexionar sobre estos prejuicios y a cambiar la imagen que se tiene de esta generación invisibilizada.
Según un estudio realizado por Tsunami LATAM, un grupo de investigación enfocado en estas generaciones, el 31% de los adultos mayores de 50 años ha experimentado discriminación debido a su edad.
Es importante destacar que los adultos mayores representan más de un tercio de la población mundial y son responsables de la mitad del consumo global. A pesar de esto, siguen enfrentando estereotipos y falta de representación en publicidades, medios y cine.
La expectativa de vida ha aumentado en 5.5 años desde el año 2000, lo que demuestra que la adultez es una etapa activa y llena de posibilidades.
Mirian Goldemberg enfatiza que los adultos mayores son capaces de continuar activamente en la fuerza laboral, el voluntariado y ofreciendo servicios para subsistir.
Además, destacó que la mayoría de los adultos mayores en Latinoamérica están conectados a la tecnología, utilizando smartphones para diversas actividades, como consultar correos electrónicos, buscar información en internet y acceder a redes sociales.
El estudio también revela que un 73% de los adultos mayores a partir de los 45 años buscan estudiar y aprender sobre nuevos temas, demostrando que no hay edad para el aprendizaje y la búsqueda de conocimiento.
En conclusión, es fundamental desafiar los prejuicios y estereotipos asociados a la adultez, reconociendo la importancia y el potencial de esta generación invisibilizada.
La edad no debe ser una limitante, y es necesario construir un futuro donde la edad sea celebrada y reconocida en toda su esencia.
