En una emocionante jornada en Las Vegas, los Kansas City Chiefs lograron una remontada épica liderada por Patrick Mahomes, asegurando así su tercer título en los últimos cinco años al derrotar a los San Francisco 49ers 25-22 en tiempo extra.
Aunque estuvieron en desventaja durante la mayor parte del partido, los Chiefs lograron ganarlo en el último segundo del tiempo extra, consolidando la actuación histórica de Patrick Mahomes. El mariscal de campo fue determinante, llevando al equipo en sus hombros y demostrando por qué es considerado uno de los mejores en la liga.
El Super Bowl LVIII comenzó con un inicio complicado para los Chiefs, quienes tardaron cerca de 30 minutos en anotar su primer touchdown. San Francisco se adelantó con una jugada magistral que encontró a Christian McCaffrey solo en la zona de anotación. Sin embargo, en la última jugada de la primera mitad, los Chiefs lograron sumar puntos con un gol de campo.
La remontada de los Chiefs comenzó tras un grave error de San Francisco en un despeje, resultando en un fumble y un rápido pase de touchdown de Mahomes a Marquez Valdes-Scantling, poniendo a Kansas City en ventaja por primera vez en el partido.
A pesar de los esfuerzos de San Francisco, que llegó a la zona roja en la primera serie ofensiva del tiempo extra, fueron frenados por la defensiva de los Chiefs y se conformaron con un gol de campo. En el momento crucial, Travis Kelce y Patrick Mahomes emergieron para llevar a los Chiefs a la zona roja, y en el último segundo, Mahomes encontró a Mecole Hardman para anotar el touchdown decisivo del Super Bowl LVIII.
