Las autoridades de Islandia ordenaron el martes una nueva evacuación de la ciudad de Grindavik (suroeste) ante la «alta probabilidad» de una erupción volcánica, tras producirse casi 800 sismos en las últimas horas en la zona, informaron fuentes oficiales.
La actividad sísmica y los flujos de lava subterráneos se intensificaron el fin de semana en la península de Reykjanes, cerca de la capital, Reikiavik, lo que llevó a las autoridades a evacuar a casi 4.000 personas de la ciudad pesquera de Grindavik.
En las últimas horas se registraron en la zona casi 800 temblores de magnitud no mayor a 3,1, según indicó el Instituto Meteorológico de Islandia en un comunicado. Añadió que la mayoría de estos «microterremotos» se detectan normalmente a profundidades de entre 3 y 5 kilómetros.
«En resumen, la probabilidad de una erupción sigue siendo alta», advirtió la entidad.
Por su parte, el diario islandés Morgunbladid reportó que sobre las 15:00 horas locales del martes se solicitó otra «evacuación repentina» en Grindavík. «Tan pronto como se anunció esto hubo cierta conmoción en la ciudad, pero ahora los preparativos se han reducido. Sin embargo, la evacuación continuará», indicó el periódico.
En la zona «se detectó gas, por lo que se decidió evacuar silenciosamente», afirmó Hjördís Guðmundsdóttir, director de comunicación de la defensa civil, en una entrevista con mbl.is.
«Hubo una llamada de la Defensa Civil para evacuar Grindavík. Se está realizando la evacuación de la zona», dijo por su parte Úlfar Lúðvíksson, jefe de policía de Suðurnes, citado por el periódico.
El diario agregó que las autoridades ordenaron también construir muros de protección alrededor de una planta de energía geotérmica en la zona, para resguardarla de posibles fujos de lava.