La transformación digital es un cambio en los negocios que, apalancado de las tecnologías emergentes y de la mano de la innovación, permite alcanzar los resultados planteados en la estrategia de las organizaciones; esto quiere decir que lo digital y la innovación son temas que continuamente se complementan para lograr los objetivos.
Dada la importancia que la tecnología juega en el crecimiento de las compañías, 58% en México y 68% en Centroamérica actualmente se encuentran en la etapa de ejecución de su proceso de transformación, mientras que 22% y 15% respectivamente prevén iniciarlo en menos de un año, de acuerdo con el más reciente estudio de KPMG México, Panorama de la innovación en México y Centroamérica 2023. Superar los retos para desplegar iniciativas.
A lo anterior se suma el hecho de que cada vez es más frecuente que empresas nativas digitales ingresen al mercado con modelos de negocio disruptivos e innovadores capaces de reconfigurar la estrategia competitiva de las organizaciones tradicionales. Ante este panorama, lo digital y la innovación se han convertido en una capacidad fundamental para las operaciones de los negocios, dejando de ser simplemente una herramienta opcional.
Respecto a qué tecnologías tendrán mayor impacto en los próximos tres años, 80% de las compañías en México y 77% en Centroamérica consideran que serán los datos y analíticos, pues actualmente existe conciencia suficiente sobre la importancia y necesidad de explotar “el petróleo de nuestros tiempos”, es decir, los datos, para lograr una ventaja competitiva. En la encuesta también destacan tecnologías como la inteligencia artificial analítica, las aplicaciones, el RPA (robotic process automation) y la inteligencia artificial generativa (IAG).
Sin embargo, la transformación digital no tendrá el efecto esperado si no se incentiva una cultura organizacional que promueva una mentalidad de innovación. Si bien es posible que las empresas adquieran las mejores tecnologías del mercado, lo que hace la diferencia es la creatividad e innovación de las personas que contribuyen con sus ideas y capacidad de superar retos para lograr casos de uso exitosos, al mismo tiempo que aprenden de aquellos que no lo fueron.
Por otro lado, el esfuerzo debe estar encabezado por las y los líderes de las compañías, quienes tienen que predicar con el ejemplo para que este proceso permee en todos los niveles, sin limitarlo únicamente a un área específica dedicada a la innovación, cuya tarea, si es que existe en la organización, es lograr un cambio de mentalidad.
En conclusión, es vital aplicar la tecnología con un enfoque de innovación para evitar caer en el riesgo de simplemente ejecutar procesos de manera rápida, pero con eventuales ineficiencias. Por ello, para sacarle el máximo provecho a la inversión digital, es crucial que los equipos involucrados busquen pensar diferente, procurando mantener una mentalidad que se enfoque en el arte de lo posible y la creatividad, lo que permitirá a las organizaciones destacar en el mercado.