Al menos 35 estudiantes resultaron heridos tras la explosión de una bomba molotov que estaban fabricando en el Internado Nacional Barros Arana (INBA), ubicado en el centro de Santiago, Chile. El incidente ocurrió ayer cuando un grupo de jóvenes, de entre 14 y 18 años, preparaba el artefacto en uno de los baños del instituto antes de participar en una concentración que se realizaría en las afueras del colegio.
Según el coronel de Carabineros, Fernando Albornoz, cuatro de los estudiantes se encuentran en riesgo vital debido a quemaduras que afectan entre el 20% y el 30% de sus vías respiratorias. Además, 25 estudiantes permanecen internados en distintos hospitales de la capital.
El Ministerio Público chileno ha iniciado una investigación para determinar las circunstancias del accidente y si hubo participación de terceros. Investigaciones preliminares de la Fiscalía indican que se encontraron restos de «líquido acelerante» tanto en el baño donde ocurrió la explosión como en otras áreas del recinto educativo.
Este suceso ha generado gran conmoción en la comunidad educativa y se espera que las autoridades tomen medidas para prevenir futuros incidentes relacionados con la fabricación de explosivos artesanales en contextos escolares.