La solicitud del presidente Nayib Bukele de tomar acciones más fuertes ante el COVID-19, aún no se ha aplicado en el país, porque los diputados aún no han dado respuesta al Estado de Excepción.
Sin embargo, aunque para muchos esto parezca una exageración, en países como España ya se han tomando acciones ante la pandemia; por ejemplo, ha limitado el máximo de movimientos de los ciudadanos y todo el país queda cerrado bajo el decreto del estado de alarma.
Según el informe del gobierno los ciudadanos “únicamente podrán circular por las vías de uso público para la realización de las siguientes actividades: adquisición de alimentos, productos farmacéuticos y de primera necesidad. Asistencia a centros sanitarios. Desplazamiento al lugar de trabajo para efectuar su prestación laboral, profesional o empresarial. Retorno al lugar de residencia habitual. Asistencia y cuidado a mayores, menores, dependientes, personas con discapacidad o personas especialmente vulnerables. Desplazamiento a entidades financieras. Por causa de fuerza mayor o situación de necesidad».
Al aplicar este tipo de restricciones, lo que se busca evitarán aglomeraciones y controlar que los ciudadanos apliquen adecuadamente las medidas a fin de evitar posibles contagios.
El Salvador, gracias a las medidas tempranas que se tomaron, es uno de los pocos países del continente que no han reportado casos positivos del virus. Actualmente, ya se ha declarado alerta roja y aún se espera la pronta aprobación de Estado de Excepción.
«Cualquier medida que tomemos ahora parecerá exagerada. Cualquier medida que queramos tomar después será insuficiente», dijo el presidente Bukele.
