Con la presencia de la ministra de Turismo, Morena Valdez, y la ministra de Economía, María Luisa Hayem, la empresa URBIQUITY colocó la primera piedra del Proyecto Costa Dorada en la Costa del Sol. Este desarrollo, catalogado como el más grande de playa en la historia del país, refuerza a El Salvador como un destino atractivo para inversionistas en turismo y desarrollo habitacional.
Durante el evento, el CEO de URBIQUITY, Luis Sanfeliu, destacó el impacto de este proyecto, subrayando que «al colocar esta primera piedra, damos inicio no solo a la construcción de un proyecto emblemático, sino también reafirmamos nuestro compromiso con el desarrollo sostenible y el progreso de El Salvador». Costa Dorada se convierte en un símbolo del crecimiento y la seguridad que ha alcanzado el país en los últimos años.
El 60% de los terrenos ya están reservados, reflejando la confianza de los inversionistas, tanto locales como extranjeros. Según los datos presentados:
- 35% de los inversionistas son residentes de El Salvador.
- 34% son compatriotas que viven en el extranjero.
- 31% provienen de otros países, demostrando que Costa Dorada ha captado la atención de inversores internacionales que, con otras opciones disponibles como Cancún, Tulum, Belice o Panamá, han optado por invertir en la Costa del Sol salvadoreña.
Un proyecto ambicioso y de impacto El proyecto Costa Dorada contempla una inversión de alrededor de 150 millones de dólares y contará con:
- 194 viviendas.
- Una marina con estándares internacionales.
- Dos restaurantes.
- 40 hangares y 30 muelles flotantes.
- Un centro comercial y una gasolinera.
El gobierno salvadoreño ha sido clave para crear un entorno favorable que ha incentivado la inversión extranjera, gracias a la estabilidad y seguridad actuales en el país.
Costa Dorada es el reflejo del crecimiento de El Salvador como destino turístico y residencial, consolidando al país como un foco de inversión a nivel mundial.