El gobierno salvadoreño ha dado un paso significativo hacia la implementación de la generación de electricidad nuclear, al entregar los instrumentos legales necesarios al Organismo Internacional de Energía Atómica (IAEA). Este movimiento, anunciado por el presidente Nayib Bukele, tiene como objetivo principal avanzar hacia una matriz energética más diversificada y sostenible.
La entrega de los aplicativos para el uso de energía nuclear con fines pacíficos fue realizada por Daniel Álvarez, titular de la Dirección General de Energía, Hidrocarburos y Minas (DGEHM), y Adriana Mira, vicecanciller de El Salvador. Este acto refleja el compromiso del país con la descarbonización y la búsqueda de alternativas energéticas que beneficien tanto al medio ambiente como a la población.
Rafael Mariano Grossi, director de la IAEA, destacó la importancia de este paso y señaló que El Salvador está dando un ejemplo al comprometerse con la diversificación de su matriz energética y el aprovechamiento de aplicaciones nucleares pacíficas.
Este movimiento hacia la energía nuclear no es nuevo para El Salvador. En marzo de 2023, la Dirección de Energía firmó un acuerdo de cooperación con Thorium Energy Alliance, con sede en Estados Unidos, para explorar la generación de energía nuclear utilizando combustible de torio. El torio, un elemento más seguro y eficiente que el uranio en la generación de energía eléctrica en reactores nucleares, representa una alternativa prometedora para el país.
La decisión de incursionar en la energía nuclear se basa en la necesidad de diversificar la matriz energética a largo plazo y alcanzar los objetivos de descarbonización del país. Actualmente, un 68.4 % de la demanda nacional de energía es abastecida con generación renovable, que incluye centrales hidroeléctricas, parques fotovoltaicos, granjas eólicas, generación de biomasa, geotérmica y gas natural licuado.
El Salvador, al dar este paso hacia la energía nuclear, se posiciona como un líder regional en la búsqueda de soluciones innovadoras y sostenibles para satisfacer sus necesidades energéticas, al tiempo que contribuye a la protección del medio ambiente y la mitigación del cambio climático.
