El Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) de El Salvador anunció este sábado la instalación de un cerco zoosanitario en los departamentos de La Unión y San Miguel, en respuesta al resurgimiento del gusano barrenador en Honduras. Esta medida preventiva busca evitar la entrada de la plaga al territorio salvadoreño, después de que el vecino país confirmara los primeros seis casos en su frontera sur.
El MAG informó a través de sus redes sociales que, además del cerco, brigadas veterinarias están reforzando la asistencia en nutrición animal y ofreciendo charlas sobre prevención de enfermedades en las zonas afectadas.
La alerta surge un día después de que Honduras confirmara el resurgimiento del gusano barrenador, con casos reportados en vacas y caballos del departamento de Choluteca, cercano a la frontera con Nicaragua. La ministra de Agricultura hondureña, Laura Elena Suazo, explicó que algunos de los animales infectados estaban en tránsito hacia El Salvador.
El gusano barrenador, conocido científicamente como Cochliomyia hominivorax, fue erradicado de Centroamérica hace más de dos décadas. Sin embargo, en los últimos años ha reaparecido en Panamá, Costa Rica, Nicaragua y ahora Honduras. A diferencia de los casos en animales reportados en Honduras, los contagios en Panamá, Costa Rica y Nicaragua también han afectado a humanos.
El gusano barrenador es una plaga peligrosa que afecta a mamíferos de sangre caliente, incluyendo humanos. Las moscas hembra depositan sus huevos en heridas abiertas, y las larvas que emergen se alimentan del tejido del hospedador, causando severos daños. Los síntomas incluyen una protuberancia dolorosa en la piel, secreción de líquido y la sensación de movimiento bajo la piel a medida que las larvas crecen.
El Salvador, que se declaró libre de esta plaga en 1995, ha reforzado las medidas de control para evitar su reintroducción, trabajando en estrecha colaboración con las autoridades veterinarias locales y regionales.






