Una nueva revisión sistemática publicada por la Biblioteca Cochrane concluyó que existe evidencia de alta certeza de que los cigarrillos electrónicos con nicotina ayudan a más personas a dejar de fumar en comparación con otras terapias disponibles. Esta investigación, considerada una de las más rigurosas en el campo de la salud pública, actualiza el análisis que Cochrane realiza desde 2014 sobre el uso de estos dispositivos para la cesación del fumado.
La décima actualización, publicada el 24 de octubre de 2025, evaluó 104 estudios científicos, 14 más que la edición anterior, sumando datos de 30,366 adultos fumadores que utilizaron cigarrillos electrónicos con el propósito de abandonar el tabaco tradicional. Los hallazgos muestran que quienes recurren a cigarrillos electrónicos con nicotina tienen mayores probabilidades de mantenerse sin fumar por al menos seis meses, en comparación con quienes utilizan terapias de reemplazo de nicotina o dispositivos sin nicotina.
Según los investigadores, por cada 100 personas que usan cigarrillos electrónicos con nicotina para dejar de fumar, entre 8 y 11 podrían lograrlo, mientras que solo 6 de cada 100 lo conseguirían mediante terapia de reemplazo de nicotina o cigarrillos electrónicos sin nicotina. Las probabilidades se reducen aún más para quienes no reciben apoyo o únicamente participan en intervenciones conductuales, con 4 de cada 100 alcanzando la meta.
No obstante, Cochrane advierte que aún es necesario generar más evidencia, especialmente sobre los efectos de los nuevos modelos de cigarrillos electrónicos, diseñados para ofrecer una mejor administración de nicotina. Los expertos señalan que estos dispositivos más modernos podrían aumentar las tasas de abandono del fumado, pero subrayan la importancia de continuar evaluando su seguridad y eficacia mediante estudios a largo plazo.
