El presidente estadounidense Joe Biden celebró este sábado el alunizaje de una sonda de su país, algo que según él inaugura una «nueva era de exploración espacial».
El módulo no tripulado Odysseus, construido por una empresa privada y financiado por la NASA, aterrizó cerca del polo sur lunar el jueves, más de 50 años desde la última misión de la agencia espacial al vecino cósmico de la Tierra, el Apolo 17.
Intuitive Machines, con sede en Texas, la primera empresa privada en lograr un alunizaje, anunció el viernes que su sonda sufrió complicaciones y probablemente terminó tumbada de lado en lugar de posarse verticalmente en la Luna, pero que los datos científicos y las imágenes que captó deberían poder recuperarse.
«Estados Unidos está una vez más liderando al mundo hacia la Luna», dijo Biden en un comunicado.
Este alunizaje, el primero de un dispositivo estadounidense desde el fin del legendario programa Apolo en 1972, supone «una nueva etapa apasionante de una nueva era de exploración espacial», agregó el mandatario.
«Esta es la primera de muchas misiones con una asociación público-privada, algo que reúne a nuestros socios comerciales e internacionales para llevar a humanos de regreso a la Luna por primera vez en décadas», sostuvo.
El Odysseus lleva instrumentos científicos de la NASA, que se propone explorar el polo sur de la Luna antes de enviar allí a sus astronautas, en el marco de sus misiones Artemis.
