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Barco atacado por hutíes se hundió, dice Gobierno de Yemen

El gobierno internacionalmente reconocido de Yemen informó este sábado que el buque Rubymar, cargado con miles de toneladas de fertilizante, se hundió en el Mar Rojo tras ser atacado a mediados de mes por los rebeldes hutíes, y calificó lo ocurrido como «una catástrofe medioambiental sin precedentes”.

El navío, de propiedad británica y con bandera de Belice, se hundió la noche del viernes por «factores meteorológicos y fuertes vientos», dijo la célula de crisis que gestiona el hundimiento del buque en un comunicado reproducido por la agencia de noticias oficial yemení Saba, donde se advierte que el hundimiento «provocará un desastre medioambiental en las aguas territoriales yemeníes y en el mar Rojo».

El texto lamentó que la comunidad internacional no haya «respondido a los llamados del Gobierno para evitar el desastre» después de que el buque quedara abandonado y semihundido durante casi dos semanas. Las autoridades de Yemen analizan los pasos a seguir y buscan «determinar las mejores formas de afrontar las repercusiones y atender el desastre ambiental resultante».

«Una nueva tragedia”

El primer ministro y ministro de Exteriores de Yemen, Ahmed bin Mubarak, escribió en X (Twitter) que lo sucedido «es una nueva tragedia para nuestro país y para nuestro pueblo”. Bin Mubarak denunció que Yemen «paga cada día el precio de las aventuras de la milicia hutí», que desde mediados de noviembre lleva efectuando ataques contra la navegación comercial en el mar Rojo en apoyo a los palestinos de la Franja de Gaza.

El Comando Central de Estados Unidos (CENTCOM) indicó tras el ataque que el buque transportaba más de 41.000 toneladas de fertilizante, mientras que el Ejecutivo yemení dijo que transportaba 22.000 toneladas de fosfato amónico, altamente tóxico. Según las autoridades de Yemen, la dirección del barco era de nacionalidad siria y su tripulación estaba formada por 24 personas: 11 sirios, seis egipcios, tres indios y cuatro filipinos, que fueron evacuados a Yibuti.