La historia de “Polar”, un perrito de la comunidad Iberia, Zona 6 del Distrito Capital, comenzó marcada por la tristeza y el abandono tras el fallecimiento de su dueña. Deshidratado, con signos de desnutrición y solo, su situación conmovió a los vecinos, quienes no dudaron en alertar a las autoridades.
La denuncia fue atendida de inmediato por parte de la Alcaldía de San Salvador Centro través de la Dirección de la Mujer y la Familia. Polar fue localizado y trasladado con urgencia a una clínica veterinaria, donde recibió atención médica integral, desparasitación, exámenes completos y un plan nutricional especializado.
El final de esta historia, sin embargo, es más que un rescate: es una segunda oportunidad. La Comuna decidió adoptar a Polar, quien ahora se une a la familia de la Alcaldía de San Salvador Centro, recibiendo el cariño y cuidado que tanto necesitaba.
La comunidad celebra este gesto que refleja cómo la sensibilidad y la acción inmediata pueden transformar vidas, incluso las más pequeñas y peludas.
