La Federación Salvadoreña de Fútbol (FESFUT) enfrenta nuevas sanciones de la FIFA tras los episodios de racismo y discriminación ocurridos durante el encuentro de eliminatorias rumbo al Mundial United 2026 frente a Surinam, jugado el 8 de septiembre en el estadio Cuscatlán.
De acuerdo con la resolución del Comité Disciplinario de la FIFA, las medidas incluyen una multa de 50,000 francos suizos (equivalente a unos $62,715). Estos fondos deberán invertirse en la ejecución de un plan integral contra la discriminación, el cual será supervisado y aprobado por el organismo internacional.
La segunda sanción afecta directamente a la afición: el duelo clasificatorio contra Panamá, programado para el 10 de octubre en el Cuscatlán, se disputará con la restricción de al menos el 15 % del aforo en las zonas ubicadas detrás de las porterías, como castigo por la conducta registrada en el partido anterior.
En su comunicado oficial, la FESFUT recalcó su condena a cualquier acto de racismo o discriminación, comprometiéndose a trabajar junto con FIFA, CONCACAF y demás entes internacionales para promover un ambiente de respeto y equidad en el fútbol salvadoreño.
La federación también apeló a la responsabilidad de los aficionados, recordando que la conducta en las gradas puede marcar el futuro de la selección nacional. Advirtió que, de repetirse hechos similares, las sanciones podrían escalar hasta la pérdida de puntos o la exclusión de torneos internacionales, un escenario que pondría en riesgo la proyección del balompié salvadoreño en el ámbito mundial.
