Fernando Alonso lo ha vuelto a hacer. En el Gran Premio de Singapur, el piloto asturiano llevó su Aston Martin AMR24 a posiciones que superan notablemente el rendimiento esperado del coche. Cada punto que suma es considerado por el equipo como «inesperado», dado el actual nivel de competitividad.
El fin de semana comenzó con Alonso reconociendo que el equipo se encuentra en una posición difícil, calificándose como el «séptimo equipo» y, en su análisis tras las prácticas libres, incluso «octavo o noveno». A pesar de estos pronósticos desalentadores, el piloto demostró su habilidad al conseguir un resultado en calificación y carrera que dejó sorprendidos a los estrategas de Aston Martin.

«El resultado de carrera de Alonso es mejor que el mejor resultado que predecía nuestra estrategia», comentó Mike Krack, director del equipo, al finalizar la competencia. A pesar de tener al menos tres equipos más fuertes detrás, solo los Ferrari lograron posicionarse por delante del asturiano, quienes actualmente son terceros en el campeonato de constructores.
«Con los Ferrari ha sido difícil porque tenían más ritmo, y en general podemos estar contentos. Por la mañana, habíamos estimado que el mejor resultado posible era alrededor del noveno lugar, y terminamos octavos sin que nadie de los rivales haya abandonado», agregó Krack.
En momentos críticos de la carrera, cuando parecía que los perseguidores estaban a punto de alcanzar a Alonso, este sacó décimas que dejaron perplejos a los ingenieros: «Fernando lo tenía todo bajo control», expresó Krack. Esta no es la primera vez que el piloto español supera las expectativas calculadas por las computadoras de Aston Martin. Según Alonso, la posición normal en este Gran Premio hubiera sido la décima quinta, pero en las últimas carreras ha logrado terminar siempre por encima de esas proyecciones.






