Cada 10 de octubre, el mundo conmemora el Día Mundial de la Salud Mental, una iniciativa de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que busca aumentar la conciencia sobre los problemas de salud mental y combatir los mitos y estigmas que los rodean.
Desde su creación en 1992 por la Federación Mundial de la Salud Mental (WFMH), este día ha sido fundamental para sensibilizar a la comunidad global sobre la importancia de la salud mental, trabajando junto a múltiples socios para implementar acciones que generen un cambio duradero.
Este año, el lema de la campaña es “Es hora de priorizar la salud mental en el lugar de trabajo”. La OMS enfatiza que ambientes laborales seguros y saludables son esenciales para proteger la salud mental de los empleados.
“Las condiciones poco saludables, la estigmatización y la exposición a riesgos como el acoso son factores que afectan negativamente la salud mental en el trabajo”, subrayó la organización. Dado que el 60% de la población mundial trabaja, es urgente tomar medidas que promuevan la salud mental en estos espacios.
La pandemia de COVID-19 ha exacerbado la crisis de salud mental a nivel global, incrementando los nuevos casos y deteriorando las condiciones existentes.
Renato Oliveira, jefe de la Unidad de Salud Mental de la OPS y la OMS, destaca que mejorar los sistemas de diagnóstico y tratamiento de trastornos mentales es crucial no solo para reducir el sufrimiento, sino también para avanzar en la cobertura de servicios de salud mental en general.
Un informe reciente de AXA, basado en una encuesta de Ipsos, reveló que el 32% de la población mundial experimenta problemas de salud mental, con un 39% de jóvenes entre 18 y 24 años sufriendo formas graves de ansiedad, estrés o depresión. Además, el lugar de trabajo puede influir tanto positivamente como negativamente en la salud mental de los empleados. Ilana Ron-Levey, directora ejecutiva del Sector Público de Gallup, enfatiza que existe una relación directa entre cómo se sienten los empleados en su entorno laboral y su bienestar emocional general.
Con estos datos en mente, es esencial que empresas y gobiernos implementen políticas y beneficios que fomenten un ambiente laboral saludable y apoyen el bienestar integral de sus empleados. En este Día Mundial de la Salud Mental, la clave está en priorizar la salud mental no solo como una cuestión de salud, sino también como un imperativo para el desarrollo y la prosperidad en el trabajo y la vida.